¡Búscame de todo corazón!
"Ahora, pues, Israel, ¿qué pide Jehová
tu Dios de ti, sino que temas a Jehová tu Dios, que andes en todos
sus caminos, y que lo ames, y sirvas a Jehová tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma; que guardes los mandamientos
de Jehová y sus estatutos, que yo te
prescribo hoy, para que tengas
prosperidad?
He aquí, de Jehová tu Dios son los cielos, y los cielos de los cielos,
la tierra, y todas las cosas
que hay en ella.
Solamente de tus padres se
agradó Jehová para amarlos,...
...y escogió su descendencia después de ellos, a vosotros, de entre todos los pueblos, como en este día.
Circuncidad,
pues, el prepucio de vuestro corazón, y no endurezcáis más vuestra cerviz.
Porque Jehová vuestro Dios es Dios de dioses y Señor de señores, Dios
grande, poderoso y temible, que no hace acepción de personas, ni toma
cohecho;
que hace justicia al huérfano y a la viuda; que ama también al
extranjero dándole pan y vestido.
Amaréis, pues, al extranjero; porque extranjeros fuisteis en la tierra de Egipto.
A Jehová tu Dios temerás, a él solo servirás, a él seguirás, y por su nombre jurarás.
A Jehová tu Dios temerás, a él solo servirás, a él seguirás, y por su nombre jurarás.
Él es el objeto de tu alabanza, y él es tu Dios, que ha hecho contigo
estas cosas grandes y terribles que tus ojos han visto.
Con setenta personas descendieron tus padres a Egipto, y ahora
Jehová te ha hecho como las estrellas del cielo en multitud.
“Circuncidaos a
Jehová, y quitad el prepucio de vuestro corazón, varones de Judá y
moradores de Jerusalén; no sea que mi ira salga como fuego, y se encienda y no
haya quien la apague, por la maldad de vuestras obras” Jeremías 4:4
*La circuncisión era la señal del pacto entre el pueblo escogido
Israel y Dios, esto significaba quitar el prepucio de los varones.
Ahora bien, la circuncisión era la muestra de obediencia y entrega al Señor.
Muchos en el caminar cristiano se van acomodando al pecado, lastimosamente esto se da, acomodarse al pecado es ya no sentir que estas en error, sino más bien ver el error o pecado como algo normal y cotidiano en tu vida.
Ahora bien, la circuncisión era la muestra de obediencia y entrega al Señor.
Muchos en el caminar cristiano se van acomodando al pecado, lastimosamente esto se da, acomodarse al pecado es ya no sentir que estas en error, sino más bien ver el error o pecado como algo normal y cotidiano en tu vida.
Muchas personas ya no sienten que están en error, puesto que están tan acostumbrados a mantenerse
en el pecado que el Espíritu
Santo de Dios en sus vidas se ha apagado, es decir se ha contristado a tal punto que no puede redargüir de pecado, puesto que no se está en sintonía con el Espíritu.
Hermanos amados, estamos en los últimos tiempos, ya no es momento de acomodados a una vida cristiana apática a las cosas del Espíritu, ya no es tiempo de estar practicando el pecado, ya no es hora de ser un cuerpo más en una banca de la Iglesia, sino más bien ¡es hora de convertirnos al Señor, es momento de volvernos de todo corazón El!
es momento de ponerte de pie y de
permitir al Señor que te circuncide y quite el prepucio de tu corazón, esto significa tener una verdadera relación personal
con el Señor, obedecer
su Palabra y hacer un pacto de santidad y fidelidad a Él.